sábado, 16 de febrero de 2013

Y de pronto… ¡me invadieron los boludos!



Todas las clasificaciones de boludos: boludos resignados, boludos aplicados, boludos solidarios, boludos con las mejores intenciones, que creen que con sus boludeces van a salvar el mundo y como no podían faltar, boludos hijos de puta (éstos además son peligrosos porque convencen a una cierta cantidad de boludos que los sigan)

Primero, fue un boludo que quiso meterme en un grupo de boludos después conocí una serie de boludos resignados a ser utilizados y a mantener a los boludos h.d.p. que los tienen convencidos de que su destino es mantenerlos a ellos. Después conocí a los grupos de boludos que se identifican lamentándose y consolándose mutuamente por haber tenido la desgracia de haber sido tomados por boludos, después están los que tratan de salvar a quienes han caído en las redes de los h.d.p. y aquí se arma una tremenda guerra entre los que quieren conservar a sus boludos y los que quieren que los boludos cambien de bando, pero ninguno les ofrece la posibilidad de dejar de ser boludos.

Obviamente no existe tal posibilidad, lo mejor es mantenerse alejada, como si fuera un mal contagioso, que aunque no lo es, es pegajoso como un chicle en el zapato.

Lentamente los boludos irán quedando atrás y habrás aprendido a poner más atención.